El mundo de la impresión existen infinidad de tintas como las acuosas, solventes, eco solventes, látex… Y entre ellas también podemos encontrar las tintas termocromáticas, fabricadas con alta tecnología.
Estas tintas cambian de color dependiendo de la temperatura en la que se encuentren. Si la temperatura sube o baja el color puede cambiar o bien, puede aparecer o desaparecer.
El cambio de color de las tintas termocromáticas se activa en unas temperaturas determinadas estandarizadas: 15ºC, 31ºC y 45ºC. Aunque, también se pueden activar por debajo de los 10ºC.
Las tintas termocromáticas son perfectas para la impresión de etiquetas de bebidas con uno de sus principales objetivos de indicar si la bebida está a la temperatura correcta para ser consumida o descubrir mensajes ocultos.
Tipos de tintas termocromáticas
- Irreversible: son tintas que sólo cambian una vez. Cuando el color aparece este permanece aunque la temperatura cambie.
- Reversible: cuando la temperatura vuelve al estado de no activación el color original aparece.
Estas tintas se pueden aplicar en múltiples superficies como impresión en madera, plásticos, cerámica, vidrios…
Muchas marcas ya se han sumado al uso de las tintas termocromáticas para ofrecer una experiencia interactiva con el consumidor. Una de ellas es CocaCola que ha lanzado diversas latas que se activan las tintas con el frío invitando al consumidor a disfrutar de la «experiencia helada de Coca-Cola».
También te sonarán otras aplicaciones como las tazas que cambian de color con la temperatura caliente o las tintas que reaccionan a la luz y cambian de color (fotocromáticas).
Si estás pensando en realizar un proyecto creativo también te puede interesar la impresión digital mediante tintas conductivas.
